¡Bye, bye, ojeras!
Hoy hemos caído en un tema complicado: las ojeras. Esas fieles acompañantes que siempre están, aunque no se las necesite… ¿Qué podemos hacer para desplegar una auténtica "operación camuflaje" que las oculte?
Decálogo para unas rebajas 10
¡Ya están aquíiiiiiii! (léase con entonación teatrera porque a veces meterse en esa vorágine da miedito…). En Rojo de Fassi, para que no te sobrepasen las montañas de ropa y las colas en las tiendas ni te tiemble la tarjeta, hemos preparado un decálogo con consejitos básicos para salir airosa de esta carrera de obstáculos. ¿Preparada?
1. Buscando en el baúl de los recuerdos. Antes de salir de casa haz un repaso por tu armario. A veces tenemos por ahí perdidas prendas que la moda ha reinventado y podemos darles una segunda vida sin tener que comprarnos otras nuevas muy parecidas.
2. Wishlist. ¿Llevas toda la temporada deseándolo? ¡Ahora es el momento! Anota tus deseos y, en la medida de lo posible, ¡hazlos realidad!
3. Dime cuánto tienes… Y te diré qué puedes/debes comprar. Si destinas un presupuesto concreto a las rebajas luego no habrá remordimientos ni cargos de conciencia. Eso sí, sé realista y no intentes engañarte a ti misma.
4. El look para un día de shopping sí importa, y mucho. Elige ropa cómoda, que no te haga perder demasiado tiempo en vestirte y desvestirte en el probador. Si quieres buscar algo para ponerte con una prenda concreta, llévatela, así podrás ver la combinación exacta y acertar.
5. Invierte en básicos. Las tendencias son efímeras y muchas veces no merece la pena gastarse un dineral en algo que dentro de cuatro días ya no estará de moda. En cambio hay prendas, y sobre todo complementos, que siempre permanecen. Un buen bolso negro, unos salones, una americana… Apuesta por la calidad en estos casos, para lo demas ¡lowcost!
6. Sé fiel a tu estilo. Una cosa es seguir las tendencias y otra disfrazarse. Si no te sientes cómoda, no te lo pongas. Para la moda, igual que para todo en esta vida, hay que tener personalidad. Demuéstrala.
7. Lo que no vale, no vale. Engañarte a ti misma comprándote una prenda una o dos tallas más pequeña porque tienes pensado ponerte a dieta para que te sirva es un sinsentido. Si realmente la necesitas hazte ya con esa prenda, pero de tu talla. Si no es así, espera a ver los resultados de tu nueva vida sana y entonces podrás comprar la talla que te gustaría.
8. De etiqueta. Es imprescindible ser consciente de los cuidados que requiere una prenda antes de llevárnosla a casa. Si te gusta querrás tenerla siempre impecable y, a poder ser, no tener que llevarla a la tintorería un día sí y otro también…
9. ¿Innovar? ¡Sí, gracias! ¿Por qué siempre tenemos que ir a las mismas tiendas? Vale que su precio sea más asequible y sigan las tendencias al pie de la letra, pero… ¿no estás cansada de ver tu ropa multiplicada por un millón en la calle? Las rebajas pueden ser un momento perfecto para descubrir pequeños rincones con mucho encanto que el resto del año nos parecen un poco prohibitivos.
10. Siempre nos quedará Internet. Si no tienes tiempo y pasas de agobios, esta opción te va a gustar (sobre todo desde que las grandes cadenas han abiertos sus tiendas online). Una tarde de shopping desde el sofá puede ser un planazo. Si tienes tus reticencias te recomendamos que empieces por comprar complementos y calzado. No tendrás grandes problemas para elegir tu talla y seguro que te quedan bien. Y si no es así, puedes devolverlo.
Y tú, ¿tienes algún truquito para rentabilizar al máximo las rebajas? ¡Cuéntanos!
Más consejos como estos (y mejores) en "Tu belleza, cuestión de estilo"
12+1 Hábitos para Sentirte Mejor
Hay una serie de hábitos que te harán sentirte mejor por dentro y por fuera. ¿Sacudimos la pereza y nos ponemos en marcha? Let's go girls!
- Desayuna rico, rico. Está en juego la energía para todo el día, así que… ¡no empieces a medio gas!
- ZzzZzZzzz. Duerme las horas que necesitas para que tu cuerpo se recupere. Lo ideal son ocho, pero cada uno tiene su propio reloj corporal. Pon en hora el tuyo.
- Rutinízate. Necesitamos mantener ciertos "patrones" de comportamiento para que nuestro cuerpo y nuestra mente no se descoloquen.
- ¡Necesito respirar! Sal a la calle, date un paseo y airea tu mente.
- Hidratación elevada a la máxima potencia. Bebe por lo menos un par de litros de agua al día y alimenta tu piel con cremitas que la enriquezcan.
- Haz un "kit-kat". Por lo menos date un descanso mental de cinco minutos cada dos horas. Resetea y empieza de nuevo.
- Sport time. ¿Seguro que no tienes ni veinte minutos para hacer una tabla de ejercicios en casa? ¡Fuera excusas! Lo agradecerás…
- Inspira, expira… Dedica cinco minutos al levantarte o antes de acostarte a respirar bien, con calma. Mano de santo para el estrés.
- Cenita ligera. Si quieres dormir bien, no te pases con lo que comes antes de irte a la cama.
- ¡Ahora me toca a mí! Tendrás mil cosas por delante, pero aunque sea debajo de las piedras tienes que encontrar tiempo para ti. Tú eres tu mejor inversión.
- Beauty menus. Comer bien no es cosa de un día. No se trata de que estés a dieta constatemente, si no de que aprendas a comer sano y, de vez en cuanto, te permitas tus caprichitos.
- Estírate. Hacer ejercicios de estiramiento te sentará genial y lo mejor es que puedes hacerlos en cualquier momento y circunstancia.
- Cualquier momento es bueno para (son)reír. Y si es en compañía, mejor.
¡Pon firme a tu celulitis!
Habíamos quedado en que íbamos a empezar a cuidarnos, ¿no? Pues vamos a ver qué podemos hacer para librarnos de una pesadilla que atormenta a más de una solo con mencionar su temido nombre: ¡la celulitis! Que no te confundan las nubes que se avecinan este finde, en breve el veranito llamará a la puerta y ya será tarde, así que… ¡pasemos a la acción!
- Di "hasta luego" a las hamburguesas, bollería industrial y demás familia. Las frutas y verduras han llegado a tu vida para quedarse, aunque esto no quiere decir que no te puedas dar algún caprichito (tampoco es cuestión de ser extremistas, que es peor…).
- Salada tú, no tu comida.
- Date a la bebida, ¡de agua! El alcohol solo para ocasiones muy especiales (y siempre con moderación).
- ¡Fuera tabaco! Es un vicio caro, malísimo para tu salud y encima eleva a la enésima potencia tu celulitis, ¿quieres más motivos para dejarlo?
- Y cuando llego a casa… un masaje y duchita con agua fría para tus piernas. Aprovecha para darle uso al guante de crin realizando movimientos circulares en dirección ascendente.
- El gel exfoliante y el anticelulítico serán tus mejores armas, ¡no te olvides de ellas!
- ¡En marcha! Nada te ayudará más a airear tu mente que hacer un poco de deporte (no es necesario que te conviertas en campeona olímpica, aunque no seremos nosotras las que te pongamos impedimentos). Sal a correr, a nadar, vete a clase de pilates… o simplemente empieza por subir las escaleras a pie, ir caminando a los sitios… Son pequeños gestos que hacen mucho.
¿Empezamos?
Fuente: "Más bonita que ninguna". Ed. Rojo de Fassi
«Kiss me»
Los labios, junto con los ojos, son los grandes protagonistas de nuestro maquillaje. Repasamos algún truco profesional para que siempre digan "kiss me":
- Si tienes los labios finos conseguirás que parezcan más voluminosos con una barra de acabado cremoso brillante.
Básicos para un buen neceser
Muchas veces las rebajas son para nosotras sinónimo de ropa, ropa y más ropa, pero… ¿y los cosméticos? ¿Por qué no aprovechar este momento para hacernos con un buen "fondo de neceser"? Analizamos los must que no pueden faltar para que consigas un maquillaje perfecto:
Fondo de maquillaje: puedes elegir diferentes texturas en función de tu tipo de piel y de la capacidad cubriente que busques. El fluido se adapta a la mayoría de rostros porque puede ser hidratante, nutritivo… y más o menos cubriente. En crema es ideal para pieles con tendencia seca, al igual que el compacto, que es el que mejor esconde manchas e imperfecciones. Para pieles jóvenes la crema hidratante con color o el fondo en espuma son perfectos y para la maduras mejor en mousse poque no marca líneas de expresión. Si tienes la piel grasa nada mejor que un fondo compacto con acabado en polvo y, para las pieles más sensibles, fondo mineral. Es el más natural y no contiene conservantes químicos.
Correctores: los correctores de tono matizan las imperfecciones en la pigmentación de la piel. Los tienes blancos o beige claro (dan uniformidad y luminosidad a la piel), rosas (dan resplandor a cutis apagados), verdes (disimula rojeces), malva (para pieles cansadas o muy claras) o azules (igualan el tono de la pieles mates y oscuras). Los correctores claros y oscuros disimulan los contrastes de luces y sombras que se crean en zonas como la nariz, mentón, frente o pómulos. ¡Elígelos siempre de la misma textura que el fondo!
Polvos matizadores o translúcidos: con ellos conseguirás que el maquillaje dure intacto más tiempo y evitarás brillos. Que sean siempre semitransparentes para no modificar el tono del fondo.
3 claves sobre el blush
El colorete o blush consigue dar frescor al rostro, rejuvenecerlo y armonizar las facciones. Tu aspecto puede cambiar radicalmente con un solo golpe de brocha, sigue leyendo y quédate con nuestras 3 claves para un acabado perfecto:
– El tono más acertado de blush es el más similar al color natural de tus labios y a algunos matices del iris. Si tienes la piel clara y cabello rubio, opta por tonos fríos de la gama de los rosas. Si tu piel es dorada y tu cabello castaño o rojizo, mejor los anaranjados y la gama de los marrones.
Christmas gifts
¡Cuántos más regalitos compras, más baratos te salen!
Hay muchas maneras de demostrar cuánto quieres a alguien y muchas maneras de decirlo sin palabras. Un regalo pensado, de esos que demuestran que conocemos a la otra persona, puede ser una buena alternativa y, si además es práctico y motivador, conseguirás tocar la fibra sensible, ¡seguro!
¿Todavía no has dado con la opción perfecta? En Rojo de Fassi te proponemos un regalo para cada una de esas mujeres que son una parte fundamental en tu vida. Sacarles una sonrisa no es tan complicado, verás…
(Clic en cada imagen para ver más y comprar)
Para las más guapas…
Para las que les gusta pintarse sonrisas…
Para las que se casan…
Para las futuras mamás…
Para las que van a triunfar en 2015…
Para las que más saben de estilo…
Inteligencia emocional
Conocerte mejor a ti misma es el punto de partida para controlar la imagen que proyectas en los demás. La inteligencia emocional te ayuda a desarrollar tu capacidad de "conectar" con quienes te rodean, generando empatía con tu entorno y una mayor confianza en tu manera de ser y actuar.
¿Cómo puedes ser más inteligente emocionalmente?
- Sé consciente. Intenta reconocer cuales son tus virtudes y debilidades. Con esa base podrás potenciar lo mejor de ti misma y trabajar para corregir los aspectos "menos buenos".
- Autocontrólate. Siente, pero no dejes que los sentimientos se apoderen de ti y te lleven a actuar de manera irreflexiva y poco beneficiosa para ti. Piensa antes de actuar.
- Motívate. Busca nuevos retos, comprométete y seguro que trabajarás más duro y saborearás cada pequeño logro con ganas.
- Empatiza. Ponerte en el lugar del otro te ayudará a entender sus ideas, deseos y puntos de vista. Afrontarás mejor los "encontronazos" y, en ocasiones, incluso sacarás buenas conclusiones.
- Cultiva tus competencias sociales. A ser un "ser social" también se aprende. Relacionarte con diferentes personas es la mejor manera de ampliar tus horizontes personales y profesionales.
- Y por último, aunque no menos importante: ¡date tiempo! La inteligencia emocional hay que ejercitarla. Es cuestión de práctica…